Convocatoria Valencia
La Comunidad Autónoma de Valencia ha convocado pruebas selectivas de acceso al cuerpo superior técnico de administración cultural de la Administración de la Generalitat.
Esta convocatoria establece que “En caso de persistir el empate, si fuera entre personas de distinto sexo, se dirimirá a favor del sexo femenino en caso de que esté infrarrepresentado dentro del colectivo de personas que formen parte del cuerpo, escala o agrupación profesional, objeto de la presente convocatoria en la fecha de su publicación”. Esta disposición hace que, por el momento, no nos parezca oportuno preparar esta oposición ni elaborar materiales.
La Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, dice que “A los efectos de esta Ley, se entenderá por composición equilibrada la presencia de mujeres y hombres de forma que, en el conjunto a que se refiera, las personas de cada sexo no superen el sesenta por ciento ni sean menos del cuarenta por ciento”. Por tanto, si se introduce un criterio de género, en el caso de que la presencia del sexo femenino sea superior al 60 por ciento dentro del colectivo de personas que formen parte del cuerpo, escala o agrupación profesional el criterio de desempate tiene que favorecer al hombre. Si no se hace así, no se defiende la igualdad, sino una posición de privilegio. Aplica este criterio, por ejemplo, Murcia, en donde en caso de empate el criterio es “El sexo infra-representado en el Cuerpo, Escala y Opción objeto de esta convocatoria, en el supuesto de que lo hubiera”.
El Ayuntamiento de París ha sido multado por contratar a demasiadas mujeres. Porque no se trata de contratar a muchas mujeres, sino de igualdad.
En caso de recurso, esto abre paso a un contencioso que podría durar años. Y no queremos estar en un escenario así.
Por otra parte, en oposiciones hay algo fundamental. Todo el mundo juega el mismo partido con las mismas reglas. No hay ningún matiz. Ninguno. La Constitución dice que el acceso a la función pública se hará de acuerdo con los principios de mérito y capacidad. Y ningún otro más.
Por decirlo gráficamente, pensaremos en poner el balón si es indiscutible que el partido es limpio, no hay trucos, todo el mundo tiene las mismas posibilidades y no se atiende a ninguna circunstancia personal, ni a ser mujer ni a ninguna otra. Si esto no es así no es que lo critiquemos. El proceso puede ser totalmente respetable, lógico, justo o lo que se quiera. Pero no es el tipo de proceso de reclutamiento en el que participemos.